UGT publica el Contador de la Vergüenza para denunciar las muertes en el trabajo

Personas trabajadoras que no volverán a casa

UGT quiere visibilizar el drama de la siniestralidad laboral y por este motivo publica hoy “El contador de la vergüenza” en la que diariamente actualizará la cifra de personas que mueren por el solo hecho de ir a trabajar. Un contador que se podrá seguir en la página web del sindicato https://www.ugt.es/ y se visualizará también a través de una pancarta en blanco y negro que se colocará en el edificio de UGT de Avenida de América, 25, en Madrid.

Detrás de cada muerte hay verdaderas tragedias, a diario, para numerosas familias.

UGT considera que la gran mayoría de estas muertes podrían evitarse con el cumplimiento riguroso de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, con más recursos para la reforzar la prevención en las empresas y para aumentar el nivel de vigilancia por parte de la Inspección de Trabajo y con el cumplimiento de los convenios colectivos.

Es preciso establecer unas condiciones laborales más dignas porque los vínculos de la precariedad y siniestralidad son evidentes. En este sentido, es vital avanzar hacia un mercado laboral con empleo estable y de calidad y derogar ya las dos últimas reformas laborales, en especial la de 2012, que ha devaluado el trabajo, disparado la temporalidad y parcialidad de los contratos y ha promovido la aparición de riesgos psicosociales (muchos potenciadores de patologías que derivan en infartos y derrames cerebrales, primera causa de muerte en el trabajo).

Asimismo, es necesario crear la figura del Delegado territorial y o sectorial de prevención para mejorar la seguridad y salud laboral en las pymes, porque donde no hay representación sindical hay más riesgos. Por el contra, los centros de trabajo sindicalizados, son centros de trabajo más seguros.

UGT ha instado al Gobierno a que ponga en marcha ya la mesa de diálogo social para abordar un Plan de Choque contra la Siniestralidad Laboral que aborde todos estos aspectos. El objetivo debe ser que no se produzca, ni una muerte más en el trabajo.