Es urgente y fundamental contar con una Directiva comunitaria que regule la gestión de los riesgos psicosociales en las empresas

Atajar la precariedad laboral mejoraría la salud mental de las personas trabajadoras.

Ana García de la Torre ha asistido a la Jornada: “Salud mental y precariedad laboral. La gestión de los riesgos psicosociales”, que se ha celebrado con motivo de la Presidencia Española del Consejo de la UE, y se ha desarrollado los días 26 y 27 de septiembre en Toledo. En esta jornada se ha debatido ampliamente la necesidad de regular, a nivel europeo, la gestión de los riesgos psicosociales en las empresas.

Es evidente que la precariedad laboral perjudica a la salud mental de las personas trabajadoras. De hecho, el Comité Económico y Social Europeo, elaboró a petición de la Presidencia Española del Consejo, un Dictamen sobre Trabajo precario y salud mental, en donde se pone de relieve la influencia de las condiciones de trabajo en la salud mental de las personas trabajadoras. En dicho Dictamen se indica que, si en la Unión Europea se eliminaran las exposiciones a riesgos psicosociales laborales, la carga de depresión caería entre el 17 y el 35% y las enfermedades cardiovasculares entre el 5 y el 11%.

La temporalidad, la parcialidad involuntaria, la inseguridad laboral, las altas exigencias unidas al bajo control sobre el trabajo, los bajos salarios, los horarios que no permiten la conciliación, son todos ellos factores que impactan negativamente en la salud mental de las personas trabajadoras.

UGT viene denunciando, desde hace tiempo, que los riesgos de origen psicosocial y organizativo son los peor gestionados en las empresas, lo que sin duda influye en la aparición o empeoramiento de problemas de salud mental entre las personas trabajadoras y que ya son muchas las voces que reclamamos una mayor protección de la salud mental de las personas trabajadoras.

El sindicato continúa reivindicando la elaboración, con la participación de los agentes sociales, de una Directiva comunitaria dirigida a regular la gestión de los riesgos psicosociales en las empresas, que sirva de paraguas para todos los Estados miembros que, como España, no dispone de una norma de estas características. De esta forma, se unificaría la protección de la seguridad y salud de las personas trabajadoras de Europa frente a este tipo de riesgo.

Además, UGT reclama que las patologías derivadas de la exposición a riesgos psicosociales de origen laboral, sean incluidas de forma urgente en el Cuadro de enfermedades profesionales español, recogido en el RD 1299/2006, de 10 de noviembre y recuerda que la OIT, ya en 2010, incluía estas patologías en su listado, a diferencia de nuestro país, donde apenas se reconoce el origen profesional de los trastornos mentales relacionados con el trabajo.

El sindicato insta al futuro Gobierno a que convoque, en cuanto sea posible, una mesa de dialogo social en materia de prevención de riesgos laborales, donde se negocie un Plan de Choque contra la siniestralidad laboral en el que se aborden los riesgos psicosociales de origen laboral, ya que la primera causa de muerte en accidente de trabajo en nuestro país son los infartos y derrames cerebrales, patologías que podrían estar relacionadas con la exposición a riesgos psicosociales, como por ejemplo el estrés laboral.

También demanda mayores recursos, tanto humanos como materiales, para que la Inspección de Trabajo fomente sus actuaciones en el control del cumplimiento de la normativa por parte de las empresas respecto a protección de la salud mental de las personas trabajadoras.